36º encuentro con niños
Encuentro 36 de niños. UNA LEY PARA SER LIBRES
Nos encontramos para celebrar el mandamiento nuevo del amor.
Santo y Seña 35: ¿Para qué nos envía Jesús el Espíritu Santo?
Para cambiar nuestro corazón y darnos fuerza para ser testigos suyos, allí donde estemos.
Se organizará el grupo de manera que los niños construyan diez caminos que converjan en un lugar central establecido por el catequista (en lo posible señalizado), utilizando piedras, ramas, etcétera.
Mientras se construye, el animador catequista les entrega un cartel con el nombre de su camino, el mandamiento que está significando.
Se ordenarán primero los tres que fijan la relación con Dios y luego los siete que fijan la relación con los que nos rodean.
Cuando acaben la construcción de los caminos, los constructores se pondrán dentro de cada uno y dirán su mandamiento, luego avanzarán por su camino hacia el centro.
Si hay chicos que han sobrado, se los colocará en el centro y cuando todos hayan llegado y expresado su mandamiento, ellos mostrarán y proclamarán el mandamiento nuevo en un gran cartel en forma de corazón .
Luego de esta dinámica, se invitará a los chicos a que traten de explicar con sus palabras el mandamiento que les tocó.
¿Qué significa hoy para nosotros cada mandamiento? ¿Por qué todos los caminos se encontraron con el mandamiento nuevo? (Ayudar a ver que vivir cada mandamiento es una manera de amar).
* Jesús nos enseña a vivir de una manera nueva y nos enseña con su vida.
* Volver a leer Jn. 13, 34—35: ¿Cómo nos pide Jesús que amemos? “COMO ÉL”
¿Cómo ama Jesús? (Recordar gestos y actitudes, que nos muestren el amor de Jesús).
* Esta semana vamos a tratar de vivir los mandamientos como nos enseña Jesús.
El catequista habrá preparado papelitos con algunos de los mandamientos - Por ejemplo:
-Honrarás al padre y a la madre.
-No cometerás actos impuros.
-No levantarás falsos testimonios ni mentirás.
-No codiciarás.
-Amarás a Dios sobre todas las cosas.
Cada chico sacará un papelito, y durante la semana se esforzara por vivirlo, irá anotando en el mismo papel lo que hizo para poder lograrlo. En el próximo encuentro, cada uno deberá traer el papel con su propósito.
Para terminar le pedimos a Jesús y a nuestros hermanos que nos ayuden a vivir el amor. En una ronda cada uno apoyará la mano en el hombro del compañero y compartiremos la oración.
Se puede cantar: “Un mandamiento nuevo”
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